Estamos asistiendo a una auténtica revolución en la industria de la alimentación, una revolución en la que la proteína vegetal de guisante se impone como alternativa alimentaria más completa a la proteína de origen animal.
No se trata de una imposición que la industria lleva a cabo para marcar tendencia, más bien al contrario: es la propia sociedad la que pide cambios, la que busca opciones en un mercado que, cada día, propone nuevos productos, nuevas recetas, nuevas formas de alimentarse para cuidarse personalmente y contribuir al cuidado del planeta a través de una alimentación tan saludable como sostenible -según el estudio “The Global Impact o Food Production” de la Universidad de Oxford, en Reino Unido, alrededor de un 25 % de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero provienen del sector de la alimentación-.
Porque al creciente número de personas que siguen ya una dieta basada en plantas, en la actualidad que, según diferentes estudios, superan ya los cinco millones en España, se siguen sumando otras que, movidas por diferentes motivos entre los que también se encuentra la curiosidad, desembarcan en una forma de alimentarse que ofrece, cada día, más y mejores posibilidades organolépticas, culinarias y nutricionales.
Y en esa nueva experiencia alimentaria la proteína vegetal de guisante se está convirtiendo en referente absoluto.
Molendum Ingredients, filial del Grupo Dacsa, ha presentado su proteína vegetal de guisante, su Pésol Pea, y la industria alimentaria se ha rendido y los consumidores se han entregado.
La Pésol Pea de Molendum ha pasado rápidamente a convertirse de un ingrediente desarrollado con materias primas de calidad excelente en el departamento de I+D+I de Molendum, a uno de los ingredientes más valorados por la industria alimentaria de cara a ofrecer a los consumidores los alimentos que demandan con las garantías que exigen.
La proteína vegetal de guisante de Molendum ha demostrado ser el mejor aliado, tanto en húmedo como en seco, para sustituir carnes y pescados en los preparados alimentarios de la industria porque se trata de la proteína vegetal de guisante idónea como alternativa a la proteína de origen animal, entre otros motivos, por su versatilidad, calidad nutricional sabor y textura.
Se trata de cualidades que, hace apenas unos años, las personas que seguían y siguen un estilo de alimentación vegetariano, vegano o flexitariano, tenían que sacrificar casi en su totalidad a cambio de ser fieles a sus principios, ya que la industria, casi en mantillas, comenzaba a dar sus primeros pasos en investigación de ingredientes plant based para sustituir a la proteína de origen animal.
La oferta era poco surtida, apenas versátil y tanto sabor como textura dejaban mucho que desear.
La proteína vegetal de guisante ha dado un vuelco considerable a esta situación, tanto que se ha llegado a hablar de revolución en la industria de la alimentación.
De hecho, la proteína vegetal de guisante ha llegado a traspasar las puertas de la cocina doméstica haciéndose, en algunas ocasiones un hueco y, en otras, con prácticamente toda la carta en restaurantes que llegan a presentar hasta cuarenta ofertas gastronómicas elaboradas con la proteína vegetal de guisante.
