La cadena de suministro es una herramienta vital y distintiva, especialmente, en la industria plant-based.
No se trata de una apreciación sin más, porque si la logística puede determinar la calidad, competitividad y proyección en el tiempo de los beneficios de una empresa, en el caso de la industria plant-based, la fortaleza de esa cadena de suministro es determinante.
Los productos elaborados a base de plantas, como la línea Hi-Vegs que Dacsa Food Solutions elabora para el canal Horeca y el Retail a partir de materias primas, 100% vegetales y de alta calidad en origen, no solo presenta una imagen de marca atractiva de cara al mercado, además, ofrece todas las garantías necesarias en su etiquetado para avalar una cadena de suministro tan transparente como eficiente.
Productos elaborados con materias primas como las que ofrece la filial de Dacsa, Molendum Ingredients, y que abarcan desde su proteína vegetal texturizada, húmeda y seca, Pésol Pea, hasta harinas naturales elaboradas a partir de la molienda de granos ancestrales.
De hecho, y a nivel nacional, entre 2019 y 2021 el mercado los productos de base vegetal no ha parado de crecer y expandirse en España, registrando cifras de crecimiento de un 48% sobre los resultados de años anteriores, consiguiendo un aumento del 20% en el volumen de ventas. Unas Ingredientes, todos ellos libres de alérgenos y no modificados genéticamente que servirán para fortalecer la cadena de suministro de la marca en la industria plan-based garantizando la trazabilidad. Una de las fortalezas más destacadas de la cadena de suministro.
Una trazabilidad que, en el caso de los productos plant-based, se convierte en una cuestión vital, tanto real como metafóricamente, porque muchos de los consumidores y consumidoras que se decantan por una dieta, por ejemplo, sin gluten por ser alérgicos a esta proteína, se juegan su salud cuando conceden su confianza a una marca cuyo etiquetado asegura que el producto está libre de gluten.
Y no solo se trata de productos libres de alérgenos, las fortalezas de la cadena de suministro en la industria plant-based se apoyan también en las que fueron tendencias y ahora se han convertido en hábitos. Nuevos estilos nutricionales que por cuidado de la salud y el bienestar personales y, por supuesto, también del planeta y de los efectos del cambio climático sobre la vida en el mismo, se han impuesto con fuerza a nivel global.
Cifras que en 2023 han aumentado: según datos publicados en junio de 2023 por InfoRetail, el volumen de ventas ha aumentado un 3%.
Se trata de una tendencia firme que necesita sostenerse tanto en la retroalimentación de la confianza de los clientes como en la calidad de los productos y para garantizar lealtad a esa confianza es necesario consolidar las fortalezas de la cadena de suministro en la industria plant-based.
Un ejemplo práctico se puede extraer de la experiencia de Dacsa con su cadena de suministro de maíz Flint para producir flaking grits -copos de maíz desmenuzado-, que comprende desde la selección de las semillas hasta el último tramo de la cadena de suministro.
Un proceso sofisticado y consolidado a lo largo de los últimos años, que permite garantizar los altos estándares de calidad, seguridad alimentaria y trazabilidad que actualmente exigen clientes de la industria y consumidores.
